CUANDO SE BLOQUEA EL CIUDADANO

Hasta el momento muchos han sido los motivos por los cuales el ciudadano común se preocupa diariamente. La violencia en todas sus manifestaciones, el alto costo de la vida, la salud, el desempleo y otras, forman parte de una inmensa gama de preocupaciones ya que son parte de nuestro diario vivir. Vemos disminuido nuestro poder adquisitivo y en relación directa un significativo aumento de la violencia, sobre todo la intrafamiliar, por lo tanto es lógico suponer que hay una relación entre ambos, amén del consumo de bebidas alcohólicas y la poca tolerancia que exhiben muchas personas. A raíz de todas éstas preocupaciones la gran mayoría de las personas echan mano a los mecanismos para establecerse un bloqueo mental, aunque luego les explote la dura realidad. Esto es un mecanismo de defensa para sentirse menos mal y no llegar a deprimirse por X o Y motivo. Son mecanismos de autocomplacencia. Es por esto que la persona se bloquea y prefiere muchas veces no pensar que las cosas están difíciles hasta que se presenta el escollo.

Por otra parte, nos enfrentamos a una espiral en las que la sociedad recibe una serie de embates cada vez más fuertes que estremecen sus cimientos en especial de la primera institución “La familia”, logrando un cisma en ella. Es difícil hacerle frente a éstos embates. En parte porque muchos de ellos están determinados por causas externas, pero no son imposibles de salvar, sobre todo actuando con sosiego y pensando lógicamente. Buscando alternativas y siendo consistentes en la consecución del fin último. Se puede buscar culpables y achacarle responsabilidades a quien sea o a lo que sea, pero nada de esto será la solución a nuestros problemas. Solo nosotros tenemos la solución para trascender, aunque muchas veces nuestro control interno tienda a fallar ante las desigualdades que vemos.

Así pues cuando nos enfrentamos con situaciones que deben ser resueltas de una forma inmediata no hay mucho que pensar, hay que resolver. La comida por ejemplo. El alto costo de la canasta básica no admite un mañana, son necesidades que deben ser atendidas de inmediato, sin caer en vías equivocadas claro está, pero tratándose de asuntos que bien pueden ser resueltos a posteriori, vale la pena tomar las cosas con calma y meditar más las posibles soluciones antes de actuar, así vemos la mejor alternativa. Cualquier vía que tomemos, el mecanismo de bloqueo no es el más indicado, pues evadimos por así decirlo la realidad buscando subterfugios, cuando está allí y está latente. Nada resolveremos con soslayarla.