Muchos han sido los ejemplos de corrupción en los distintos gobiernos a través de los años. Ninguno se ha salvado de éstos señalamientos. Algunos de sus personeros han saboreado los barrotes, otros han escapado o burlado la justicia que los señalaba como autores primarios, secundarios o terciarios de peculado.
Hoy día un caso actual llama poderosamente la atención por el claro desparpajo con que fue cometido y la disonancia cognitiva que parece esgrimir la personalidad gubernamental señalada.
Es el caso de la Defensoría del Pueblo quien contrató los servicios de una Compañía sin experiencia alguna y de reciente constitución para la construcción y diseño de su página web por la suma cercana a los B/.200,000.00, algo sin precedentes sin duda alguna.
Todos los profesionales en diseño de páginas web que la han visto coincidirán con éste servidor que bajo ningún argumento esa página web tiene ese valor. Eso es inconcebible y fácilmente refutable por un profesional que las haga, pues el mercado está lleno de ellos.
También llama la atención que el pago a dicha empresa fue aprobado por funcionarios encargados de la Contraloría General de la República, quienes hasta la fecha no han dicho nada al respecto por los cuestionamientos que se han hecho. Su labor era auditar y verificar si lo contratado valía lo que se pagó, porque los dineros son del erario, dinero de todos y fruto de nuestros impuestos. Para eso están ellos ahí.
En otras instituciones se les pone peros a pagos insignificantes a funcionarios por viáticos a realizar distintos trámites oficiales, pero a éste pago, que significaba una erogación sumamente elevada y que a pesar de no llegar al tope para ir a licitación, era importante, no se le dio el trato más adecuado. De haberlo hecho, se habría cuestionado el gasto.
Claramente se evidencia que hubo dolo en todo éste trámite. Alguien se quedó con una buena tajada. Una tajada mayúscula de los dineros del Estado. Ahora veremos si la funcionaria señalada quien dicho sea de paso aboga por que se le pague gastos médicos por la crisis que sufre tras los justificados señalamientos, tendrá la voluntad de separarse del cargo. Es lo menos que puede hacer.
Habría que ver de igual forma todos los culpables y sus cómplices, porque un acto de esta envergadura no puede cometerse sin el concurso de varios actores. Algunos por acción otros por omisión.
La sanción, en caso de comprobarse el acto criminal, debe ser ejemplar. Las nuevas generaciones observan el desarrollo de los hechos y si no hay valores en las personas que cometieron este crimen y éste queda impune, un mensaje equivocado se estará enviando a los más jóvenes. Que el delito paga.
*Un nuevo contrato se detecta en la Defensoría por la suma de 299 mil dólares. http://www.laprensa.com.pa/impreso/panorama/portugal-escondio-nuevo-contrato/192866
*Un nuevo contrato se detecta en la Defensoría por la suma de 299 mil dólares. http://www.laprensa.com.pa/impreso/panorama/portugal-escondio-nuevo-contrato/192866
Autor: Julio Stoute.
3 comentarios:
Muchos gobiernos son masters en la ejecución perfecta del delito.
Viendo la manera como expones algo tan tangible y cuestionable, percibo como la maquinaria de la corrupción y la maldad es un verdadero virus en latinoamerica. Sin embargo hay gobiernos que tienen el doctorado en este y muchos delitos contra la humanidad, donde el silencio a favor es la única respuesta. Pero ay! de aquel que quiera gobernar para acabar con la corrupción porque es de oposición. Esos si son los mas terribles delincuentes. Sea el caso de mi alcalde en Bogotá. Las élites lo quieren fuera porque no deja filtrar los dineros en los bolsillos de los corruptos.
Tema profundo, que dará para más.
Ojalá se dilucide el tema que expones, es absurdo.
Gracias Jeabelly. La semana pasada, fue llamada a la Asamblea de Diputados la señora Patria Portugal, defensora del Pueblo de Panamá para que respondiera un cuestionario relacionado al tema del cual se le acusa.
Su participación dejó mucho que desear. A nadie le gustó la forma de manejarse como alta funcionaria pública. Mas bien parecía incapaz de ejercer un puesto de esa envergadura.
Entre las respuestas ambiguas que dio, se colige que la tal contratación de una compañía para el diseño de la página web, no existe. Lo que si existe es un contrato por igual suma de dinero para mejorar la imagen de la Defensoría y como último punto estaba la bendita página web. Así que es como si nada de lo anterior hubiese cambiado, pues salió a relucir otro contrato por una suma de dinero parecida donde la falta de transparencia era evidente. Sus días están contados. El pueblo pide su cabeza ,.
Saludos amiga
Tú lo has expreado muy bien un acto criminal siempre los mismos los que se llevan la tajada e fin , me gust´mucho tu artículo, un abrazo desde mi brillo del mar
Publicar un comentario